Ciudad de México, México 28 de octubre 2024.- En un contexto global marcado por la urgencia de combatir el cambio climático y cumplir los ambiciosos objetivos del Acuerdo de París, todos los sectores productivos deben asumir su responsabilidad en la reducción de la huella de carbono. La neutralidad de carbono, es decir, equilibrar las emisiones de dióxido de carbono con su absorción, se ha convertido en un imperativo para preservar nuestro planeta.

La videovigilancia contribuye al cuidado de la huella de carbono a través de varios aspectos clave:
- Diseño de productos de bajo consumo: Las cámaras y sistemas de videovigilancia ahora incorporan tecnologías que reducen significativamente el consumo energético sin comprometer el rendimiento.
- Diseño de productos resistentes: Equipos de videovigilancia más duraderos y de alta calidad disminuyen la necesidad de reemplazos frecuentes, reduciendo el desperdicio y las emisiones asociadas con la producción y el transporte de nuevos productos.
- Suministro de energía solar: La integración de paneles solares en sistemas de videovigilancia permite un funcionamiento eficiente y ecológico, disminuyendo la dependencia de fuentes de energía no renovables y reduciendo la huella de carbono operativa.
A medida que la tecnología avanza, también lo hacen las oportunidades para crear soluciones más verdes y responsables. La videovigilancia, junto con otros segmentos tecnológicos, tiene el potencial de liderar este cambio hacia la sostenibilidad, mostrando que el progreso y la conservación ambiental pueden ir de la mano.